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Las bombas de pozo de 200 metros son soluciones de alto rendimiento diseñadas para extraer agua desde profundidades extremas. Este tipo de bomba sumergible está preparada para funcionar de forma eficiente y continua en pozos profundos, donde se requiere una gran potencia, caudal constante y presión estable.
Son especialmente utilizadas en viviendas rurales aisladas, explotaciones agrícolas de gran extensión, instalaciones solares fuera de red y aplicaciones industriales donde el nivel freático está muy por debajo de la superficie. Gracias a su diseño robusto, estas bombas garantizan un funcionamiento fiable durante años.
Este tipo de bomba es ideal cuando otras soluciones no alcanzan la profundidad necesaria o cuando se requiere una presión elevada para impulsar el agua a largas distancias. Algunas de sus aplicaciones más comunes son:
Abastecimiento de agua en pozos muy profundos
Riego agrícola de grandes parcelas
Sistemas solares autónomos en zonas remotas
Llenado de depósitos elevados
Suministro de agua a comunidades rurales
Preparadas para trabajar a más de 200 metros de profundidad, estas bombas ofrecen una presión constante y un caudal adecuado para usos intensivos y prolongados.
Fabricadas en acero inoxidable o materiales técnicos de alta calidad, resisten la presión, la corrosión y el desgaste por sedimentos.
Muchas de estas bombas permiten su uso con paneles solares y controladores de presión, reduciendo el consumo eléctrico y los costes de operación.
Como están sumergidas, operan de forma discreta y sin ruidos, perfectas para entornos habitados o agrícolas.
Antes de elegir una bomba de pozo para 200 metros es importante valorar:
La altura manométrica total (profundidad + distancia horizontal)
El caudal necesario diario
El diámetro del pozo
La calidad del agua
El tipo de alimentación: eléctrica o solar
Una correcta elección asegura un funcionamiento eficiente, seguro y duradero.
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